En enero de 2015, el sacerdote católico Jose Palimatton fue arrestado por mostrarle pornografía infantil a un adolescente después de la misa y enviarle un mensaje de “dulces sueños” por la noche — su colega, el sacerdote John A Gallagher lo denunció ante la Policía.
Ahora, Gallagher está siendo castigado por la Diócesis de Palm Beach (Florida), por haber reportado el caso a las autoridades en vez de simplemente hacer los trámites de cambio de parroquia y devolver a Palimatton a India:
En lugar de seguir las instrucciones de la Iglesia y “hacer que se vaya”, Gallagher entrevistó a Palimattom junto con uno de sus feligreses, un oficial de policía retirado. El feligrés tomó notas en la reunión.
Palimattom admitió haberle mostrado fotos de desnudos de niños a el adolescente. También admitió que había asaltado sexualmente niños en India antes de llegar a EEUU. Unas horas más tarde, repitió esta confesión a los detectives de la unidad especializada de la policía de West Palm Beach.
Gallagher contactó a la policía, siguiendo las reglas que la Iglesia Católica había establecido después de cientos de casos de abusos sexuales llevados a cabo por el clero contra niños.
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Después de haber reportado las acciones de Palimattom a la policía, y a pesar de que estaba siguiendo las propias reglas de la Iglesia Católica, para Gallagher quedó claro que no aprobaban sus acciones.
El dijo: “Me dejaron claro que lo que había hecho (cooperar con la policía) no era lo que debería haber hecho“.
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A finales de abril de 2015 Gallagher fue llamado para reunirse con el obispo de Palm Beach, Gerald Barbarito. Otros tres funcionarios de la Iglesia estuvieron presentes. Gallagher estaba en proceso de ser ascendido y se sorprendió al recibir una llamada telefónica el día después de su reunión diciéndole que estaba siendo degradado.
El sacerdote irlandés dijo: “No dieron ninguna razón. Pregunté si podía reunirme con él de nuevo y me lo negaron. Él me dijo que si no quería ser degradado y trasladado a otra parroquia, debería dejar el sacerdocio“.
La Diócesis aprovechó luego que Gallagher tuvo un ataque al corazón y cambiaron las guardas, privándolo de la que hasta entonces era su casa — la razón que le dieron era que necesitaba tratamiento para su “enfermedad mental” (?).
Claro, porque el enfermo es él, ajá.
(vía The Freethinker | imagen: My Palm Beach Post)
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Publicado en De Avanzada por David Osorio