El pastor evangélico Carlos Javier Soto Chacón es un fundalunático cristiano que quiere imponer la versión más fanática del cristianismo en Chile. Soto llamó nuestra atención cuando le mandó un ridículo mensaje a mi amigo Ferney Rodríguez y, desde entonces, le he seguido la pista intermitentemente.
Cuando en Chile se aprobó el acuerdo de vida en pareja, Soto no pudo contener la rabia y atacó a los congresistas y activistas — amor cristiano en su más pura esencia.
Lo que nos trae al día de hoy, ya que Soto acaba de ser condenado a 300 días de cárcel por llamar ‘pederasta’ a un líder homosexual:
La sentencia fue informada por el tribunal tras el veredicto condenatorio en su contra que se conoció el pasado 23 de noviembre por un delito de injurias con publicidad en contra del director del Área de Derechos Humanos del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez.
De acuerdo a información divulgada por el Movilh, en la audiencia de este viernes el religioso amenazó al juez que leyó el fallo apuntándolo con el dedo, por lo que podría enfrentar a la justicia debido a esa situación.
Cabe recordar que Javier Soto lidera una organización denominada Iglesia Misionera Pentecostés Ríos de Agua Viva, con sede en Viña del Mar, pero la Mesa Ampliada de Iglesias Evangélicas ha desconocido su calidad de pastor y ha reprochado sus actuaciones públicas.
El delito de injuria es excarcelable, por lo que puede que Soto no pase ni un día tras las rejas, pero con su amenaza al juez Darwin Bratt, es probable que el delincuente Soto reincida. En Sin Dioses preguntan si creemos que Soto terminará en la cárcel. Me parece que no es una pregunta de si, sino de cuándo — sólo es cuestión de tiempo.
Un amigo criminal más de Marco Fidel Ramírez… por si no son suficientes los parapolíticos de su partido.
(imagen: Javier Soto)