Los medios están causando alarmismo gratuito contra el anticonceptivo hormonal Depo-Provera, basados en un metaanálisis publicado en The Lancet que habría encontrado una relación entre el anticonceptivo y un aumento en el riesgo de contraer VIH.
Los National Health Services, de Reino Unido, ofrecen motivos para mantener la calma:
- Lo que se halló fue una correlación y, como sabemos, correlación no es causación.
- De los 12 estudios incluidos, sólo tres se propusieron analizar directamente si el uso de anticonceptivos hormonales se relacionaba con el VIH.
- Todos los estudios analizados eran observacionales, o sea que las mujeres elegían su método anticonceptivo; esto podría significar que hay más diferencias en patrones de comportamiento —como la salud y el estilo de vida— entre las mujeres que optaron por este tipo de anticonceptivo y las que eligieron métodos no hormonales. Así que los anticonceptivos podrían no ser la causa directa de la relación.
- Como reconocieron los autores del metaanálisis, resulta difícil asegurar que hubo una sincronización en el uso de anticonceptivos con la subsiguiente infección de VIH.
- Todos los estudios analizados se realizaron en el África subsahariana, en países de bajos y medianos ingresos. La prevalencia del VIH en estos países es mucho mayor, por lo que el riesgo basal de contraer VIH ya era mucho mayor.
Aclaro que el metaánalisis fue hecho de manera rigurosa, sin embargo, estos estudios siempre están limitados por la fuerza y calidad de los estudios evaluados.
(Imagen: Alex E. Proimos via photopin cc)