Raif Badawi es un blogger saudí condenado a 10 años de prisión y 1000 latigazos por el ‘delito’ de pedir tolerancia y que las mujeres sean tratadas como seres humanos.
En octubre, Badawi recibió el One Humanity Award de PEN Canada:
Raif Badawi es el octavo ganador del One Humanity Award. En el 2006, el premio inaugural fue dado al periodista chino Jiang Weiping. Otros ganadores incluyen al poeta y activista birmano Zargana, a la activista mexicana Lydia Cacho, a la abogada iraní de derechos humanos Nasrin Sotoudeh, y el blogger vietnamita Dieu Cay. El premio One Humanity Award es financiado por una donación de la mecenas de PEN Canada Florence Minz.
Las palabras de la ceremonia de premiación le correspondieron a Alishba Zarmeen:
Desde el comienzo de las sociedades humanas, hemos visto la injusticia y la violencia justificada en nombre del nacionalismo y el deber religioso. Innumerables hombres inocentes, mujeres y niños han sido víctimas de la tortura y el genocidio debido a nuestra pobre comprensión de los derechos humanos y las libertades civiles. Antes del advenimiento de la ciencia moderna, los seres humanos habían recurrido a la táctica de deshumanizar al “otro”, simplemente por un color de piel diferente o el lenguaje hablado.
Hoy en día, vivimos en una era científica moderna, donde nuestra especie ha visto el universo más allá de nuestro sistema solar y donde el racismo, el sexismo, y la censura no son aceptables normas, sino tabús que no tienen lugar en una sociedad civilizada.
Por desgracia, no todos los ciudadanos de este planeta saben lo que se siente tener igualdad de oportunidades y la libertad de pensamiento y de expresión. Raif Badawi es una de esas víctimas de la injusticia y un preso de conciencia, que sufre de una flagrante violación de los derechos humanos. Él está encarcelado nada más que por atreverse a pensar por sí mismo y tener una opinión sobre el mundo en el que vive.
Raif Badawi es padre de tres niños pequeños y el esposo amoroso de Ensaf Haider. El nombre de su esposa se traduce literalmente como “justicia”. Ella pasa sus días en Quebec, luchando contra las injusticias de las que su marido es víctima.
Raif es un amigo y hermano en humanidad que no quiere nada más que hacer de este planeta un lugar mejor para sus habitantes. Y él no está solo en esta lucha. Estamos con él y lo apoyamos.
La hermana de Raif, Samar Badawi, también es una activista dedicada a los derechos humanos, la lucha por la igualdad de las mujeres en Arabia Saudita y trata de liberar a su marido abogado, Waleed Abulkhair, de la misma injusticia a la que su hermano está siendo sometido.
Quiero aprovechar esta oportunidad para pedir a las autoridades saudíes que se tomen un momento y reflexionen seriamente sobre la forma en que quieren ser vistos como país en la comunidad internacional.
Es hora de que las autoridades saudíes decidan si realmente quieren tratar a Raif, su familia, y otros como él de la misma manera inhumana que la tribu Quraish de La Meca trató a Mahoma, el profeta del islam.
Voy a cerrar mi intervención con un mensaje de Raif Badawi:
“Queremos vida para los que nos desean la muerte, y queremos racionalidad para aquellos que quieren ignorancia para nosotros”.
Ahora, Reporteros Sin Fronteras le dio a Badawi el reconocimiento de Internauta del año.
Su premio fue entregado a la doctora Elham Manea, que lo recibió en nombre de Badawi con este discurso:
Gracias damas y caballeros. Me siento honrada de estar aquí en nombre de Raif Badawi y su esposa, la activista Haidar Ensaf.
Permítanme empezar con el mensaje de Ensaf Haidar, la esposa de Raif Badawi, quien ha estado dirigiendo la campaña internacional por su liberación.
“Es una lástima que no puedo estar aquí hoy con ustedes. De hecho, me gustaría estar aquí con ustedes ahora. Dicho esto; me encantó oír las noticias acerca de su decisión de concederle a Raif Badawi el Premio Netizen para el año 2014. En nombre de Raif Badawi, nuestros tres hijos, y mío, aprovecho esta oportunidad para agradecer a Reporteros sin Fronteras por su apoyo esencial a la libertad de expresión y opinión. Su premio no sólo nos da apoyo moral, también pone de relieve cómo la lucha por la libertad de expresión es una búsqueda difícil y dolorosa —no sólo en Arabia Saudita, sino en todo el mundo— una búsqueda que necesita este tipo de apoyo internacional. Gracias por este premio “. (Ensaf Haidar, la esposa de Raif Badawi)
El mensaje de Ensaf Haidar pone de relieve el quid del asunto: a saber, la lucha por la libertad de expresión — ese es el quid del asunto. No se trata de un choque de civilizaciones ni de Oriente u Occidente. Se trata de un derecho universal, exigido por los defensores de derechos humanos y activistas de todo el mundo.
Es exigido simplemente porque es el bloque de construcción para cualquier sistema transparente, abierto y democrático.
Lo necesitamos para nuestra propia protección.
Sin él, los gobiernos pueden violar los derechos de sus ciudadanos con impunidad, el establecimiento religioso puede callar a sus críticos, y los actores poderosos en la sociedad pueden abusar de su poder sin consecuencias.
Es la conciencia de cualquier sociedad.
Algunos países, como Arabia Saudita, Irán y Rusia, afirman que la libertad de expresión debe ser restringida en nombre de la cultura, la tradición y / o la religión. De hecho, utilizan la religión para ocultar su falta de legitimidad y el estilo autoritario de gobierno. La cultura y la religión son sólo su pretexto para violar los derechos humanos con impunidad.
Debido a eso, Raif Badawi es un símbolo. Un símbolo para todas las personas encarceladas en el Reino y la región MENA por expresar sus opiniones pacíficamente.
Simplemente hagan una pausa por un momento y consideren esta cifra: Se estima que solo en la región del Golfo aproximadamente unos 40.000 prisioneros de conciencia están en la cárcel. Entre ellos se encuentra el abogado de Raif, defensor de los derechos humanos, Waleed Abulkhair, que está cumpliendo una pena de cárcel de 15 años por su defensa de los derechos humanos y por exigir reformas políticas. Entre ellos se encuentra Souad Alshammary, vocal activista de los derechos de las mujeres, cofundadora (con Raif Badawi) de la Red Progresista de Arabia, y valiente crítica del poder del clero religioso en el Reino. ¡Ella fue arrestada la semana pasada por difamar al islam!
El Premio Netizen llegó en un momento en que lo necesitábamos. Le dice a los niños de Raif que su padre no rompió ninguna ley cuando usó el espacio libre de Internet para expresar sus opiniones progresistas y expresar sus preocupaciones sobre el papel de la institución religiosa en Arabia Saudita. Les dice que su padre es uno de los pocos que se atrevieron a exigir una reforma en Arabia Saudita a través de medios pacíficos. Él está pagando un alto precio por su valentía.
En nombre de Raif Badawi, su esposa activista Ensaf Haidar, sus tres hijos y la campaña internacional para la liberación de Raif, nos mantenemos firmes, pacífica y respetuosamente, apelando ante Arabia Saudita hoy y exigimos la liberación de Raif Badawi y que retiren e todos los cargos en su contra. Ya es hora de que se haga justicia.