Esta es la tercera entrevista de la serie de perfiles ateos.
Mauricio Leguízamo Santamaría es músico y tiene una banda que se llama The Black Cat Bone, con más de 13 años de carrera profesional. Han sacado dos discos en Colombia, los cuales han tenido gran aceptación y excelentes críticas. Adicionalmente, Mauricio hace modificaciones y calibraciones de guitarras eléctricas y diseña páginas web. Hace unos años hice un reportaje sobre él para el especial de Rock al Parque de El Tiempo.
David Osorio: ¿Hace cuánto volviste a ser ateo?
Mauricio Leguízamo: En mi adolescencia, aunque no sé exactamente en qué momento, me di cuenta que había algo extremadamente mal con todo lo que había aprendido acerca de la religión, en específico la católica. Ahora me doy cuenta que toda religión está extremadamente mal.
David Osorio: ¿Cuál es tu mito favorito sobre el ateísmo?
Mauricio Leguízamo: Que de alguna forma muchos religiosos atan el ateísmo con ‘Satanás‘, sin darse cuenta que también nos parece ridículo ese concepto. Piensan que por ser ateos no tenemos ningún tipo de conducta moral. En otras palabras, creen que sin la religión vamos a salir a asesinar y a violar a todo el mundo (como si las religiones no aportaran suficiente de eso a diario…).
David Osorio: ¿Qué es lo que más disfrutas de no creer en ningún dios?
Mauricio Leguízamo: Que uno puede disfrutar de ser uno mismo sin tener miedo de algún castigo divino. Que no necesito a ningún sacerdote guiando mi vida sexual, cuando claramente ellos son los que tienen serios conflictos con la suya. Y, principalmente, que uno se quita una gran carga de encima. La religión es un gran monstruo pesado. Al sacarlo de nuestras vidas se siente un gran alivio.
David Osorio: ¿Qué sitios ateos/escépticos/de divulgación recomiendas/son tus favoritos?
Mauricio Leguízamo: La Richard Dawkins Foundation y tu blog, De Avanzada. Por otro lado, fuentes de información científica que, sin ser estrictamente ateas, claramente promueven el razonamiento científico basados en hechos y no en mitos y cuentos, me gusta mucho I Fucking Love Science que es divertido y muy fácil de entender.
David Osorio: Define “religión” en una frase.
Mauricio Leguízamo: Algo creado por el hombre para controlar a los más débiles y enriquecer a los más ventajosos. Creo que era Rodolfo Llinás que, parafraseando, decía: “Es un negocio perfecto, vende un producto inexistente“.
David Osorio: ¿Qué es la fe y qué piensas de ella?
Mauricio Leguízamo: Para mí, la fe es la negación de la lógica. “Creer” en algo es básicamente no saber o no tener conocimiento lógico sobre esa cosa. Antes pensaban que elementos de la naturaleza, como la lluvia y los rayos, eran causados por los dioses. Ahora todos sabemos a qué se deben y nos parece ridícula cualquier asociación de esos con una deidad. Es curioso que los dioses griegos, por ejemplo, sean ridículos para las religiones modernas. Lo mismo va a suceder en las siguientes generaciones. Estos dioses van a convertirse en mitología y se van a archivar en la memoria de la humanidad. La fe es, básicamente, lo que la ciencia no ha logrado explicar. A medida que se encuentren las respuestas lógicas, se va eliminando más la necesidad de tener a un ente creador detrás de ellas.
David Osorio: ¿Qué es lo peor de la religión?
Mauricio Leguízamo: La forma en que manipula a los más débiles para inyectarles falsedades y sacar un provecho económico.
David Osorio: ¿Qué hacer con el problema religioso de Colombia?
Mauricio Leguízamo: Yo creo que las nuevas generaciones a nivel mundial se están despertando y cada vez niegan más esta mentira religiosa. En el caso de Colombia se va a demorar un poco por lo que somos una cultura muy religiosa, pero eventualmente ganará la razón. Simplemente hay que enseñar y promover el pensamiento lógico y científico.
David Osorio: ¿Tienes alguna anécdota relacionada directamente con tu ateísmo que nos puedas compartir?
Mauricio Leguízamo: Me acuerdo el caso curioso de un amigo que era ateo en el colegio. Iba manejando por una carretera y lo pararon a él y a su novia a mano armada. Los bajaron del carro, les quitaron zapatos, ropa de marca, etc. Él pensó: “Dios, si existes, por favor que no le hagan nada a mi novia ni a mí“. Afortunadamente no les sucedió nada, les robaron el carro y los dejaron ahí sin nada. Mi amigo se convirtió en católico a raíz de este suceso. Pensó de verdad que un dios había intervenido para salvarlos.
Con este hecho pensé seriamente en todos los casos (muchos de esos de gente conocida) donde en situaciones semejantes las víctimas terminaban muertas, violadas, mutiladas. Simplemente no podía de dejar en pensar en por qué el favoritismo de Dios con unos sí y con otros no. No tenía ninguna lógica. La conversión de mi amigo al catolicismo me ayudó a fortalecer mi negación de un poder divino y a abrazar el ateísmo.
David Osorio: En tus palabras, ¿qué es el laicismo y por qué es importante?
Mauricio Leguízamo: Es simplemente no mezclar ningún tema religioso con el Estado. Es muy importante porque si se le permite la participación a una religión, debería entonces permitirse la participación a todas las religiones. Y el mismo Estado sabe que eso sería un error catastrófico.
David Osorio: ¿Qué aprendizajes te ha dejado el ateísmo?
Mauricio Leguízamo: Viendo la vida sin religión y sin dioses, uno se da cuenta de los prejuicios y el rechazo que la gente religiosa tiene hacia uno y hacia sus semejantes. ¿Cuál es el verdadero amor al prójimo que profesan las religiones? La vida sin dios es una vista hacia la misma condición humana, sin elementos imaginarios que influyan en el ser. Las reglas que crean las sociedades son hechas por el hombre, no por algún poder divino. La gran mayoría del mundo y sus religiones están de acuerdo en normas básicas de convivencia como no matar, por ejemplo. Esto es una manifestación humana, no un mandato divino.
David Osorio: En pleno siglo XXI, ¿la religión todavía afecta la producción musical?
Mauricio Leguízamo: Hay una frase, creo que de George Carlin, que dice que lo mejor que nos ha dejado la religión es la música. Yo estoy totalmente de acuerdo. La emoción humana puede estar impulsada por muchas cosas, entre esas la religión, aún cuando uno no esté de acuerdo con ella, logrando composiciones increíbles. Es clara todavía la influencia positiva o negativa (como la quiera percibir el oyente) de la religión en la música. Muchos de mis compositores y composiciones favoritas fueros impulsados por la religión. Pero lo que hay que tener en cuenta es que esas composiciones son manifestaciones de una emoción humana. Lo que nos encanta de la música es netamente emocional, viene de la mente y del sentimiento de uno o más individuos.
David Osorio: ¿Cuál es la postura de tus compañeros de The Black Cat Bone frente a la religión?
Mauricio Leguízamo: Yo soy ateo; Luis Fernando, nuestro bajista, cree en un tema muy espiritual de energías que fluyen en el universo, que la verdad nunca le he profundizado. Y nuestro baterista, Andrés, un devoto católico. Como yo escribo las letras, claramente mi punto de vista es el que más se refleja en esta temática. Igual no hay conflictos internos ante esto, creo que muchas de las críticas a la religión igual son hechas por los mismos religiosos, cosa que mis compañeros de banda entienden perfectamente y comparten.
David Osorio: ¿Tienen canciones blasfemas, que critiquen la religión? ¿Cómo las ha recibido el público?
Mauricio Leguízamo: Sí, hay varias canciones que critican a la religión. Han recibido buenos comentarios. Hablamos de temáticas que cualquier persona, religiosa o no, puede plantear como crítica ante el inconformismo de algo sin sentido que ha sido impuesto. Todos nos sentimos inconformes con muchas de las posturas de la religión, inclusive los mismos religiosos.
David Osorio: Vives en Villa de Leyva. ¿Cómo es la situación de los colegios allá? ¿Has encontrado un colegio humanista, que no adoctrine a los niños?
Mauricio Leguízamo: No es fácil encontrar en Colombia un colegio de esas características. Sin embargo el colegio en el que está mi hijo no es religioso. No tienen clase de religión. Igual sabemos que muchos de los profesores son católicos o cristianos y algunos les hablan de dios y religión, incluso hay compañeros de clase que le hablan a él de esto. Lo importante finalmente es hablar con él de todos esos temas de forma lógica. Siempre va a estar expuesto en una cultura altamente religiosa a todos esos conceptos. Nosotros somos, al fin y al cabo, los que tratamos de guiarlo por un camino libre de tonterías.
David Osorio: ¿Cómo crías y educas a tu hijo desde el naturalismo? ¿Qué retos cambian frente a una familia adoctrinadora? ¿Qué es más fácil, qué es más difícil?
Mauricio Leguízamo: Pues yo creo que es simplemente no-enseñarles mentiras. Todo se enseña y se muestra desde una perspectiva lógica, natural y honesta. Creo que es más difícil enseñarle a los hijos las mentiras de un dios inexistente, de Ratones Pérez, Papá Noel, etc. Es más complicado justificar estas cosas y todo eventualmente se cae por su propio peso. Todos los niños terminan enterándose que Papá Noel y el Ratón Pérez son de mentira porque son basados en cuentos inventados. El tema de dios es más complejo porque muchos adultos creen en eso, pero aplica el mismo principio de lógica que revela la verdad.
David Osorio: ¿Alguien ha tratado de infectar a tu hijo con creencias irracionales? ¿Qué hiciste para contrarrestar ese atentado contra la educación racional que tú y Érika le han inculcado?
Mauricio Leguízamo: Todos estamos expuestos a creencias irracionales constantemente. Curiosamente, el que más le ha metido en la cabeza este tipo de creencias es un niño de su edad. Nosotros abordamos el tema de una forma muy tranquila y hasta cómica. Él sabe que Superman y el Hombre Araña son de mentiras. Nosotros le decimos que el Dios del que habla su amigo, que está en las nubes y vuela por ahí, es tal cual como Superman, de mentiritas.
David Osorio: Tu hijo ha tenido la fortuna de crecer libre de dios y sus ridiculeces, ¿también ha crecido sin el Ratón Pérez y Papá Noel? En la ‘comunidad atea’ hay un debate sobre si fomentar esas creencias irracionales o no. ¿Cuál ha sido su postura como padres al respecto?
Mauricio Leguízamo: Todo con los niños es un juego. Pero esos juegos se pueden volver un arma de doble filo porque hay muchas formas de que un niño pueda interpretar las cosas. Conozco la historia de un amigo mío que le tenía pavor al Ratón Pérez. Odiaba perder un diente porque no soportaba la idea de que un ratón llegara a su cama cuando estaba dormido. Tenía un temor real ante un ratón imaginario. Sus padres nunca se imaginaron eso, pensaban que lo tomaba como la mayoría de los niños, contentos por su botín al siguiente día.
Nosotros sí le hemos hablado de Papá Noel y del Ratón Pérez pero como, efectivamente, seres de mentiras, disfrazados como los superhéroes. Y él ha entendido muy bien esos juegos de forma racional. El otro día, cuando él estaba de espaldas le di una palmada en el hombro. Cuando se volteó me preguntó por qué lo había hecho. Yo, molestando, le dije que fue un duende que salió corriendo. Se rió y cuando me di la vuelta me pegó una palmada en la cola y al voltearme me dijo, “¿Viste el duende papá? ¡Salió por allá corriendo!“. Todo fue simplemente un juego y él lo entendió perfectamente. Nunca creyó en el duende.
David Osorio: Persona a quien admires mucho, ¿por qué?
Mauricio Leguízamo: Admiro mucho a mi esposa Érika. Con ella puedo hablar lo que sea y nos reímos mucho. Me ha enseñado mucho a ser lo que soy yo, sin rodeos. La gente en general encuentra trabas, impone barreras y cierra las puertas. Con ella es todo lo contrario. Antes de ella estaba metido en una oficina aburrido de la vida. Después de conocerla aprendí de verdad a vivir y a hacer lo que me apasiona en la vida. Ella me impulsa a esto.
David Osorio: Háblanos de tu libro favorito
Mauricio Leguízamo: Debo admitir que no soy buen lector. Tengo un grave problema de concentración y me aburren las lecturas largas en general. Lo que leo en general tiende a ser corto por esta razón. Generalmente leo sobre cosas que me interesan muy puntualmente, netamente informativas. Mi libro favorito es El Perfume de Patrick Süskind. Es un gran descriptor del sentido del olfato. Por otro lado me encantó The Portable Atheist o en español Dios no existe, el libro de Christopher Hitchens que recopila varios escritos ateos. Entre esos mi favorito es ‘El compendio de pacotilla intelectual’ de Bertrand Russel.
David Osorio: ¿Qué estás leyendo en este momento?
Mauricio Leguízamo: En este momento lo que más leo es sobre guitarras y producción musical. En el tema de guitarras estoy leyendo mucho Guitar Player Repair Guide de Dan Erlewine. Es una especie de ‘biblia’ (sin la intención de chiste) de la reparación de las guitarras, muy completa. Por otro lado también estoy leyendo Modern Recording Techniques de David Miles Huber.
David Osorio: ¿Qué es lo que más disfrutas de la vida?
Mauricio Leguízamo: Estoy en la etapa de disfrutar de mi familia. Estar con mi esposa e hijo no tiene precio. Además disfruto mucho poder vivir y hacer lo que quiera, mi música, mis guitarras y todos los proyectos que se me vayan presentando.
David Osorio: ¿Cuál es tu comida favorita?
Mauricio Leguízamo: El sushi. Y por ser mi comida favorita trato de comerla moderadamente. Si no perdería su condición de favoritismo y pasaría a ser una más…
David Osorio: ¿Qué te gustaría hacer/conseguir antes de morir?
Mauricio Leguízamo: En familia, lo primordial es conseguir un buen terreno fértil con agua y construir una casa. Ver a mi hijo crecer y guiarlo para que haga lo que le apasiona, sin las presiones que tuve yo. También quisiera profundizar en el tema de lutería para poder construir mis propios instrumentos de cuerda de alta calidad.
David Osorio: Frase que le quieras dejar a los lectores (tuya o de alguien más)
Mauricio Leguízamo: Los dejo con una frase del comediante George Carlin:
Creo que todos deberían tratarse de una manera Cristiana. Sin embargo, yo no seré responsable por las consecuencias.
David Osorio: ¡Muchas gracias por tu tiempo!
Mauricio Leguízamo: ¡Gracias a ti!
Los invito a visitar la página de Mauricio: www.mauricioleguizamo.com
