Javier Soto, pastor homófobo (perdón la redundancia) de Viña del Mar, Chile, le ha enviado un mensaje a mi amigo Ferney Rodríguez, con quien fundé la Asociación de Ateos y Agnósticos de Bogotá.
El mensaje de Soto es una soplapollez pero, ¿qué se puede esperar de un líder cristiano?
Soto cita el absurdo libro escrito por analfabetos pastores de cabras de la edad de Bronce para decir que los ateos somos malos. Ohh, y mira, ¡Dumbledore condena la magia negra!
Ferney respondió, pero escribió más de dos párrafos, no numerados, sin caer en falacias, apelando a la razón, con buena ortografía, defendiendo los derechos humanos y sin alabar ninguno de los genocidios divinos, por lo que el minicerebro de Soto no podrá procesar todo eso.
Mi mensaje para él no tiene palabras de más de cinco sílabas, es sencillo: si no le gustan las asociaciones ateas, ¡no se afilie! *
Se puede palpar el miedo de Soto a que el activismo ateo despierte a las personas a las que estafa sistemáticamente. Y no feliz con amenazar el laicismo en Chile, también le envió un mensaje a Juan Manuel Santos, como si la democracia colombiana no estuviera suficientemente envenenada de cristianismo.
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* Que por favor la oficina de prensa de Soto, o el ‘acompañante’ con el que se desfoga, me avisen si no pudo procesar el mensaje – todavía puedo intentarlo con imágenes para colorear y laberintos.