En Barranquilla hay un decreto que exige el cobro de seguros a esepectáculos con más de 600 personas, y ya que la Iglesia Católica va a volver mierda la ciudad con la excusa de Semana ‘Santa’, les tocó pagar.
El sacerdote Gustavo Ortiz no estaba muy contento:
“Se debe pagar un cobro cercano a los $600.000. ¿Qué cubre esos impuestos? un seguro por si alguna persona se llega a morir en una peregrinación; por cada una de las procesiones $80.000 a la Defensa Civil y por los días que van a estar con nosotros otros $80.000”, expresó el párroco a Caracol Noticias.
Es que eso de proteger la vida no es con ellos. El señor Ortiz mostró su verdadera cara de cretino cuando para reclamar cuestionó la fe de la alcalde, Elsa Noguera:
[E]l párroco de la iglesia de San Francisco cuestionó la fe de la funcionaria: “yo creo que la alcaldesa debe reflexionar sobre su experiencia de fe como católica”, indicó el párroco […]
Aunque ahí debió terminar la cosa, Noguera cedió ante el matoneo del arzobispo Jairo Jaramillo:
Contó que tras conocer el tema, en la Alcaldía hicieron una recolecta para pagar el impuesto entre todos.
La Fiscalía debería abrir investigación contra Ortiz por sugerirle a Noguera que viole la responsabilidad de su cargo, a esta por violar la norma y a Jaramillo por ordenarle a los sacerdotes no pagar el impuesto.
Bajito, ahí tiene la Fiscalía prevaricato, concierto para delinquir y apología del delito. Este es un país laico; si no les gusta, pueden irse a Arabia Saudita.
Por cierto, deberíamos replicar este genial decreto en el resto del país.
