Tras estar en el ojo del huracán por discriminar a los discapacitados, el engendro de iglesia-partido político Mira sigue haciendo las cosas mal.
Para quitarse la justa etiqueta de discriminadores (¿y qué iglesia no lo es?), siguen discriminando:
Esa colectividad ahora puso en marcha una nueva estrategia publicitaria que incluye a candidatos con alguna discapacidad.
Ese es el caso de Dora Lilia Landázury, candidata a la Cámara por Nariño con una discapacidad, quien fue incluida en el nuevo comercial de MIRA.
“En mira todos y todas tenemos las mismas oportunidades”, dice la misma candidata en la pieza publicitaria.
Ciertamente no todos tienen las mismas oportunidades – no las tuvo Iván Moreno Piraquive a quien expulsaron por ser gay, y no las hemos tenido los ateos con sus permanentes violaciones al laicismo.
Y claramente doña Dora Lilia no tiene las mismas oportunidades que el resto: de no haber estado en condición de discapacidad no la habrían elegido para la nueva propaganda. Es pura discriminación ‘positiva’ y posiblemente políticas de identidad, dos posturas que se destilan a una sola palabra: discriminación.
