Para el papa Francisco, la curiosidad es mala:
Durante la misa que ofreció este jueves por la mañana en la capilla de la Casa Santa Marta aseguró que “el espíritu de la curiosidad no es un buen espíritu: es el espíritu de la dispersión, de alejarse de Dios, de hablar demasiado”.
Según el Pontífice, este espíritu de la curiosidad es “mundano” y “nos lleva a la confusión“.
Qué curioso, la curiosidad también nos ha llevado al heliocentrismo, por el cual la Iglesia casi mata a Galileo Galilei. ¿Habrá una defensa más obvia de la ignorancia?
La creencia en dios nos lleva a matar a quien piensa diferente… y no veo al papa Frank condenándola.
