¿Recuerdan al Sr. Rayón?
Ahora, una de las que pretenden que se calle por expresar desacuerdo con los grupos terroristas tocó las partes íntimas del Sr. Rayón sin permiso y siguió haciéndolo a pesar de que él le retiraba la mano:
¡Y en la facultad de derecho! Es que ser un “pitiyankee, pequeñoburgués” lo despoja a uno de cualquier grado de libertad o autonomía para decidir sobre el cuerpo propio.
De sólo pensar que esa violadora en potencia volvió a manosear alimentos sin antes lavarse las manos, me da asco.