Manuel Nule, miembro del grupo criminal Nule de estafas a gran escala, ha tenido un comportamiento deplorable en la cárcel.
Aunque eso es causal para no dar permisos, el juez penal 38 de Bogotá autorizó su salida de la cárcel para ir a un rito religioso:
[U]n juez de Bogotá le concedió a Manuel Nule un permiso de 24 horas para que asista a la primera comunión de su hijo que se realizará el sábado en Cartagena. A pesar de los incidentes con sus familiares, que motivaron al Inpec a abrir una investigación en su contra, y que la Fiscalía se ha quejado de que los abogados de los Nule están dilatando el proceso para afectar las investigaciones, Nule recibió este beneficio que otros reclusos nunca obtienen.
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En el caso de Manuel Nule, el juez 38 de Bogotá, quien le dio el permiso para ir a la primera comunión de su hijo, explicó: “No hay duda que ese es un acontecimiento de particular importancia en la vida del interno, porque es su hijo quien recibirá el sacramento y por supuesto, quiere acompañarlo en ese especial momento de la vida del menor, porque además, la madre del mismo reside en España, según la documentación que aportó la defensa en otra petición, la de detención domiciliaria para el señor Nule Velilla como padre cabeza de familia, que también se tramita en este Juzgado”.
Bueno, eso debió pensarlo antes de volverse el genio criminal del carrusel de la contratación de Bogotá, ¿no? Y pensar que la gracia le costó tres millones de pesos al erario.
¿Por qué no entienden que tener una religión no es patente de corso para saltarse las leyes, y mucho menos las penales, y aún mucho menos, cuando se trata de adoctrinar a un menor de edad?
