El gobierno de Juan Manuel Santos no se pronunció sobre el matrimonio igualitario y su partido acordó hundir el proyecto.
Ahora nos enteramos que el gobierno de Juan Manuel Santos calló para complacer a la Iglesia, que de otra forma no habría apoyado el proceso de ‘paz’:
En diálogo con Blu Radio, el senador Armando Benedetti aseguró que el ministro del Interior, Fernando Carrillo, no se ha pronunciado sobre el matrimonio igualitario para no molestar a la Iglesia, gran aliado del proceso de paz que se adelanta con la guerrilla de las Farc.
“El señor Carrillo no quiere molestar a la iglesia para que no dejen de apoyar el proceso de paz”, reiteró el parlamentario del partido de La U.
¡Lo que nos faltaba! Esta ‘paz’ tiene ciudadanos de segunda clase, cuyos derechos están establecidos por la Iglesia Católica.
Entre los demás motivos para oponerme al proceso se encuentran la promoción de que el crimen sí paga (lo que Sam Harris llama incentivos negativos).
Además, esta solución no está basada en la evidencia, o sea es ficticia, ya que desconoce las causas del conflicto.
Y, por si fuera poco, desde ya, el proceso ha servido de coartada para pedir la censura de opiniones disidentes (¡vaya ‘paz’!).