La ley antidiscriminación sigue causando estragos. Ahora todos los días hay un nuevo caso en el que alguien ve amenazada su libertad por tener opiniones ridículas, estúpidas y retrógradas: el homófobo monseñor Córdoba, el racista diputado Rodrigo Mesa, el periodista Wilson Araque…
Y ahora, también los responsables de la sección homófoba ‘Ay Mariquita’ de los 40 Principales:
Eduardo Montealegre, confirmó que le abrió investigación penal a la emisora Los 40 Principales por violar la ley antidiscriminación.
Señaló que se está investigando la conducta de los locutores de la emisora bogotana por violar dicha normatividad.
En diálogo con Blu, el fiscal explicó que a partir de la Ley 1482 de 2011, “esas conductas que llaman a la intolerancia”, que podrían enmarcarse en “simples comentarios” dentro de la libertad de expresión, podrían ser penalizadas si resultan “voces discriminatorias”.
La investigación se dio a partir de la denuncia que interpuso la representante a la Cámara, Alba Luz Pinilla del Polo Democrático Alternativo.
Estamos asistiendo a la imposición del delito de opinión en Colombia, en donde ya no se podrán expresar las íntimas convicciones que uno tenga, salvo que sean políticamente aceptadas y gocen de popularidad.
Debo decir que esta acción impulsada por Pinilla, fue aplaudida por otros colectivos como la Casa de la Mujer, con quienes trabajo conjuntamente en algunos temas (por lo que soy parte de la Junta Directiva de la Asociación de Ateos y Agnósticos de Bogotá).
Sin embargo, a pesar de que compartimos el objetivo de erradicar la homofobia y la discriminación sexual, yo no comparto estos métodos.
Jamás comprometería la libertad de expresión ajena para alcanzar mis metas. Me pregunto si estos activistas censores ya olvidaron lo que era ser perseguidos por ley por no encajar en el rol que les asignaba la sociedad.
