Ya conocemos las ventajas del arroz dorado sobre el tradicional.
Sin embargo, Greenpeace sigue con su peligrosa y mentirosa agenda de oposición a esta alternativa de alimentación y posibilidad de reducir inmensamente la ceguera infantil:
Greenpeace Internacional ha expresado su alarma por una publicación científica reciente que sugiere que los investigadores, apoyados por el Departamento de Agricultura de EEUU, alimentaron con arroz dorado genéticamente modificado a 24 niños en China de entre seis y ocho años de edad.
Como una mentira más obvia sería negar los resultados de que el β-Caroteno del arroz dorado es tan bueno como el del aceite, entonces decidieron apelar a que “se utilizaron niños“.
Porque hay que oponerse a una mejor nutrición infantil simplemente porque usa la tecnología… ¡y la tecnología es mala!
Ludismo en su más clara expresión.
(vía GMO Pundit)