La ingeniería genética sigue dando sus frutos. Se ha creado la primera especie animal por parte del hombre, la Drosophila synthetica, creada a partir de la mosca de fruta común, la Drosophila melanogaster:
Esta población fue creada bajo condiciones de laboratorio tales que es morfológica y genéticamente bastante diferente de la de tipo salvaje para ser una especie separada. La D. Synthetica tiene pequeños ojos blancos y alas muy venosas y no es capaz de hibridar con la D. melanogaster. Esta población fue creada en el 2012 por el suizo biólogo celular Eduardo Moreno.
Todo hay que decirlo, técnicamente esta no es una mosca transgénica, sino, como su nombre lo indica, sintética. La diferencia es muy sencilla:
Las especies transgénicas son también creadas a partir de modificaciones en el genoma, o de la introducción de genes de otras especies. Sin embargo, las transgénicas pueden cruzarse con la especie original y dar descendencia fértil, es decir, no son una especie biológica como tal.
Sin embargo, las especies sintéticas solo se pueden cruzar consigo mismas. “Solo se reproduce con las que tengan su mismo genoma, en este caso con Drosophila synthética, y no con las originales. La hemos aislado de las otras, por eso es una nueva especie”, ha explicado Moreno. Su ventaja, indica, es que no hay peligro de que contamine a las especies originales.
El artículo de Moreno fue publicado en PLoS ONE y está disponible al público.