Ni la fe, ni la religión nunca han servido para curar ni siquiera un resfriado común, sin embargo, en su mezcla de ignorancia, prepotencia y falsa superioridad moral, creen que pueden curar algo que no es una enfermedad – la homosexualidad.
Para eso han fundado organizaciones homófobas que dicen curar la homosexualidad, como Exodus International. Ahora ha salido Alan Chambers, presidente de estos representantes del odio, a decir que no pueden curar su homosexualidad:
“Como presidente de Exodus International y, aún más que eso, como un líder cristiano que está al frente de gente todo el tiempo, es mi responsabilidad guiar con honestidad y transparencia y compartir con las personas eso, sólo porque uno se vuelva cristiano… sus luchas no siempre desaparecen”, dijo. “Uno no llega a un lugar donde nunca va a ser tentado de nuevo”.
…
Aunque él mismo ha experimentado una gran libertad a través de Cristo, dice que no sería honesto si fingiera que no sigue siendo tentado por el sexo con otros hombres, a veces. Algunos de sus amigos que creen en la terapia reparativa le han dicho que pueden curarlo por completo, pero él dice que no es el caso.
Ojalá este sea el primero de una serie de casos en los que los homófobos ceden a su naturaleza y aceptan la homosexualidad como lo que es: una preferencia y ya.
(vía Secular News Daily)