Al parecer, como ya hemos visto, sí hay una forma de convencer a un conservador de que los homosexuales son personas comunes y corrientes. Esa forma es que sus hijos resulten gays.
Ese es el caso del republicano Paul Singer, quien apoya el matrimonio homosexual:
Su disposición a reunirse en las oficinas de Midtown Manhattan de su fondo de cobertura, Elliott Management, y hablar de igualdad en el matrimonio refleja la fortaleza de su compromiso con la causa. A pesar de que es heterosexual, él tiene un hijo y un yerno gays y, quienes se casaron en Massachusetts, que legalizó el matrimonio del mismo sexo en el 2004.
Singer ha recaudado dinero para la campaña de Mitt Romney, quien ya tiene un prontuario de homofobia y probablemente se opondrá al matrimonio igualitario. Supongo que el mensaje que Singer le está dando a su hijo es claro: Te amo, pero no tanto como amaría una reducción en el impuesto sobre mis ganancias.
(vía Bill Maher)