Y resulta que no es una práctica cultural milenaria japonesa, sino una idea moderna, que está desapareciendo:
Por lo menos desde que el nyotaimori —la práctica de servir sushi sobre el cuerpo de una mujer desnuda— ha estado haciendo avances fuera de Japón, los medios han hecho la misma pregunta: ¿Dónde encaja esta práctica en el contexto de la cultura japonesa?.
Para encontrar una respuesta, podemos ir al cuerpo de 168cm de largo de Miho Wakabayashi. Hasta el año pasado, la barriga desnuda y los miembros de esta chica de 30 años eran adornados una vez al mes con rodajas de pescado y fruta fresca en Sleeping Beauty “happening bar” en el distrito de Tokio Shibuya. (Este tipo de establecimiento es en los que los clientes realizan actividades íntimas mutuamente sin inhibirse).
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Como el nyotaimori prácticamente no existe hoy día, según ella y “porque es tan raro de ver, que cuando los organizadores del bar anuncian que van a hacerlo, es una buena manera de hacer que venga más gente”.
La percepción del nyotaimori fuera del Japón, de todos modos, es bastante diferente. Las historias en las noticias cubriendo inauguraciones de empresas de nyotaimori de Florida a Londres durante la década pasada lo cita como una forma de la tradición culinaria japonesa y no como una actividad underground, un malentendido que ha resultado en un considerable resentimiento.
Pues yo digo que esto debe rescatarse y reformarse (pues los hombres también podrían prestarse como bandejas de sushi… que hay que ser incluyentes).
Así que ya saben. A la próxima olviden el chocolate derretido y decidan innovar: pueden comer sushi del cuerpo de su pareja.
(visto y traducido en La mosca cojonera)
