Esta mañana nos alegramos por la sentencia de la Corte Constitucional que permitió que dos niños colombianos fueran adoptados por el periodista homosexual Chandler Burr.
Como a los conservadores les irrita ver personas felices, ya salieron a llorar y a rasgarse las vestiduras. Primero fue esa pocilga medieval en la que se ha convertido la Procuraduría bajo la dirección de Alejandro Ordóñez:
Se espera que en los próximos días la Procuraduría General presente un recurso de nulidad en contra del fallo emitido por la Corte Constitucional que avaló la adopción de dos menores en Colombia por parte del periodista estadounidense Chandler Burr, quien manifestó abiertamente su condición de homosexual.
A ellos les siguió ese hatajo de esclavos mentales de la Iglesia Católica que es el Partido Conservador:
El expresidente del Partido, el senador José Darío Salazar, dijo que la ley está hecha para que una familia sustituta, de una familia que concibió al niño –que es un hombre y una mujer- puedan ejercer el reemplazado a esas personas que dieron origen a ese niño-
Como siempre, los godos retrofachos no tienen ni la menor idea. Resulta que según ellos, una tía cuidando de sus sobrinos huérfanos no sería familia.
Y así pretenden estar en capacidad de interpretar la Constitución…