Entre todos los prejuicios y la discriminación que ha alentado la religión, la homofobia es un rasgo casi distintivo de estos sistemas de creencias basados en mitos idiotas y superstición idólatra. De hecho, su hipócrita credo de odiar el pecado y no al pecador (o eso dicen), los ha llevado a abrir centros de rehabilitación de homosexuales (!).
Ahora la Organización Panamericana de la Salud, que hace parte de la OMS, ha pedido que se penalicen quienes promuevan esos centros, dedicados a la alabanza de la ignorancia y el pensamiento único:
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió que las denominadas “terapias” para cambiar la orientación sexual no tienen base científica y deberían estar penalizadas por ley, en coincidencia con la conmemoración del Día Mundial contra la Homofobia.
A 22 años de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) eliminara la homosexualidad de su lista de trastornos mentales, siguen existiendo clínicas que ofrecen supuestas “terapias de reconversión”, que pueden significar un peligro para la salud de las personas, indicó un informe técnico de la OPS.
“Ya que la homosexualidad no es un trastorno o enfermedad, no requiere cura. En consecuencia, no existe indicación médica para el cambio de orientación sexual”, señaló la directora de la OPS, Mirta Roses.
“Estas prácticas son injustificables y deben ser denunciadas y sujetas a sanciones y penalidades dentro de la legislación nacional”, añadió.
Kudos a la OPS. Esta vez hicieron lo que debían.