¿Alguno de los lectores del blog es médico veterinario y/o zootecnista?
Pues puede que esto les interese, ya que se va a llevar a cabo el primer Congreso de Medicinas Complementarias y Terapias Alternativas en Veterinaria los días 19 y 20 de mayo. ¿Y adivinan de qué se trata?
Pues de vender pseudociencia:
OBJETIVO GENERAL:
Informar a los profesionales y estudiantes de medicina veterinaria acerca de las terapias alternativas que se practican en el país.OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
– Dar a conocer las ventajas que ofrece la aplicación de terapias alternativas
– Presentar experiencias de investigación y casos clínicos
– Poner en contacto a la academia, los grupos de investigación, los profesionales especialistas y los estudiantes.REQUISITOS:
Para profesionales MV o MVZ se requiere tarjeta COMVEZCOL, para estudiantes MV o MVZ carnet estudiantilVALOR DE LA INVERSIÓN:
Miembros ASOMEVAC: $200.000
Estudiantes: $180.000
Profesionales no Asociados $250.000La inversión incluye asistencia al evento, material, memorias virtuales y refrigerios.
Así es. Si no tienen nada mejor que hacer, que meterle dinero a la ignorancia, a lo mejor puedan pasarse un rato por allá y reírse de lo lindo.
El dichoso congreso de veterinarios matasanos fue organizado por -y esto no me lo podría inventar, es demasiado poco original como para hacerlo- la Asociación Colombiana de Médicos Veterinarios y Médicos Zootecnistas Especialistas en Medicinas Complementarias y Alternativas, ASOMEVAC.
Entre los muchos delirios que se cobran la vida y la salud de quién sabe cuántos pacientes, estos impresentables impulsan:
Medicina Homeopática
Medicina Tradicional China
Medicina Ayurveda
Medicina Herbaria
Acupuntura
Fitoterapia
Terapia Floral
Homotoxicología
Homeosiniatría
Terapia Neural
Terapia Manipulativa: Quiropraxia,Masoterapia,Shiatsu,etc
Cromoterapia/Laserterapia/Magnetoterapia
Sintergética
Reiki/ Radiónica/ Biosensores
Bioterapias: Oligoelementos, nutracéuticos, etc.
Musicoterapia
Sanación
Por lo que cuentan, esta asociación de enemigos de la Ciencia (y de personas que no deberían bautizar nunca nada más) se creó el año pasado para promover todas estas insensateces.
Lo que no me explico es cómo El Tiempo se prestó para hacerles propaganda, ofreciendo desinformación a sus lectores y poniendo su granito de arena para poner en peligro a las mascotas de esos lectores.
