En más de una ocasión lo he dicho y es que me parece que Barack Obama es tan conservador como cualquier republicano promedio.
De hecho, cuando digo que es un violador de derechos humanos lo digo muy en serio. Kenan Malik consigue condensar los motivos en un párrafo, lo que lo hace aún más genial de lo que hasta ahora pensaba que es:
Sin embargo, en los últimos tres años, no sólo ha fracasado en el cierre de Guantánamo, sino que ha extendido el asalto de Bush a los derechos y las libertades. En diciembre, Obama firmó el Acta de Autorización de Defensa Nacional que permite la detención militar indefinida. Ha mantenido la política de entregas extraordinarias (un eufemismo para el secuestro) y de cárceles secretas en todo el mundo. Ha intensificado el uso de aviones no tripulados, así como su uso en un programa de asesinatos extrajudiciales, incluidos los de ciudadanos estadounidenses, como el clérigo islamista Anwar al-Awlaki, presunto líder de Al Qaeda en la peninusla árabe, que fue asesinado por un avión no tripulado en Yemen en septiembre pasado. Ha aprobado el derecho del gobierno de despojar a los ciudadanos de las protecciones legales con base exclusivamente en su criterio. Ha establecido búsquedas de todo sin orden judicial, desde documentos comerciales a registros de biblioteca.
Pues eso, que no es que sea calderilla.
