Los relativistas culturales no son capaces de asmiliar datos que concluyan que las sagradísimas (y brutalmente represivas e incivilizadas) tradiciones culturales que defienden, atentan contra los seres humanos. Para ellos es más importante “la tradición”.
Y ahora la OMS les acaba de echar un baldado de agua fría:
Una niña que haya sufrido mutilación genital tendrá de por vida graves problemas físicos y además un alto riesgo de padecer importantes complicaciones psicológicas, similares a las que soportan las menores víctimas de abusos sexuales.
Así lo explicó en una entrevista con Efe la doctora Elise Johansen, del departamento de Salud Reproductiva de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el día Mundial de la Tolerancia Cero contra la Mutilación Genital Femenina, que se celebra hoy.
¿Qué? ¿”Día mundial de la tolerancia cero contra la mutilación genital femenina”? ¿No pudieron encontrar un nombre más largo? ¿Les costaba mucho oponerse contra todo tipo de mutilación genital, y no sólo la femenina (vamos, que la circuncisión aunque menos complicada, grave y mortal, también podría ser un objetivo menor del día de hoy)?
A estos malosos y perversos imperialistas culturales sí que se les da fatal poner nombres.
“Varios estudios destacan el riesgo de complicaciones psicológicas a largo plazo, incluyendo depresión, estrés postraumático, desórdenes mentales y ansiedad similares a los que padecen las niñas que han sido abusadas sexualmente”, afirmó Johansen, quien agregó: La doctora subrayó que incluso las que nunca padecieron alguna de estas complicaciones, sufrieron un dolor, una fuerza y una violencia que las obligó a mantenerse quietas durante el procedimiento de la ablación, “lo que es un trauma en sí mismo”.
¿Cómo así? ¿Estudios como decir estudios científicos? ¿Y quieren imponerle esos resultados, a todas las tribus silvestres y campantes, buenas, buenitas, que han elegido (?) otra forma, una no cientificista, de conocer la realidad (!)?
“Pero sobre todo, las habrán privado de por vida del órgano más sensible de todo el cuerpo, el clítoris”, apostilló Johansen. La ablación femenina comprende todos los procedimientos quirúrgicos que consisten en la extirpación total o parcial de los genitales externos u otras intervenciones practicadas en los órganos genitales por motivos culturales o no terapéuticos.
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A largo plazo es causa de infertilidad, infecciones crónicas, relaciones sexuales dolorosas, así como causa de complicaciones durante el embarazo y el parto, tanto para las mujeres como para los recién nacidos. “Se ha comprobado que la mutilación genital incrementa la prevalencia de determinados problemas sexuales, incluyendo dolor en el intercambio, disminución del deseo y merma del placer”, comentó la doctora.
¿Quién se creen que son estos occidentales con su racistas “igualdad ante la ley y mismos derechos para todo el mundo”? ¿Por qué no pueden dejar a las minorías en paz y que traten a sus unidades individuales más pequeñas como lo dictan sus sagradísimas tradiciones? Si estas dicen que las mujeres tienen prohibido el placer y el gozo, ¡pues lo tienen prohibido! Cuál Ilustración, cuál feminismo…
“En países como Egipto, Sudán y Mali grupos religiosos están promocionando la mutilación genital, y tildan a los que se oponen de neocolonizadores”. Se estima que, entre 100 y 140 millones de mujeres en el mundo han sido víctimas de la ablación.
¡Eso, eso! ¡Neocolonizadores culturales! ¡Atrevidos! ¡Metidos! ¿Por qué no permiten que unos pocos grupos reaccionarios y adictos al poder se autodenominen, por medio de la violencia, como los establecedores de las normas con las que dirán que sus subyugados se autodeterminan?
Este es el ‘brillante‘ futuro que le espera a las mujeres de esas latitudes… si es que Occidente deja de entrometerse:
Johansen explicó que, según estudios no publicados, el 21 por ciento de las mujeres que han padecido los tipos I y II de la mutilación genital -que consiste en la ablación del clítoris y los labios, pero no la sutura de la vagina- tienen hemorragias después del parto, y entre un 15 y un 98 por ciento tienen que ser internadas en hospitales. “Además, si ha habido una ablación, el riesgo de que el niño nazca con problemas o muera aumenta considerablemente. Se estima que entre 1 y 2 niños de cada cien mueren porque su madre fue mutilada en la niñez”. Además de todo lo ya citado, estadísticas clínicas demuestran que la mutilación genital causa otros daños irreparables, como el contagio del VIH-sida, o la hepatitis. A pesar de la creciente concienciación, cada año, cerca de tres millones de niñas y mujeres son víctimas de la ablación genital en el mundo, es decir, ocho mil por día, y la mayoría de estas mutilaciones, se practican cuando tienen entre cuatro y doce años de edad.
“Algunos países lo hacen pronto para que las niñas no se acuerden del dolor. Pero en otros países lo hacen más tarde porque consideran que las niñas son más maduras para asumir el dolor”, dijo la doctora. “Los que lo practican tarde también lo hacen como parte de un ritual en el que el dolor es parte del objetivo, para que las prepare para el resto de sus vidas; también para inscribir en su memoria corporal los riesgos y los peligros asociados a la sexualidad y por tanto esperan que resistan mejor las tentaciones sexuales”, añadió. Johansen señaló como una tendencia nueva y peligrosa el apoyo que está obteniendo la práctica por parte de líderes religiosos.
Pues que me llamen neocolonizador, imperialista cultural y demás palabras con las que satanizan los valores ilustrados. ¡Yo los seguiré defendiendo!
