Posiblemente no exista un término del que se haya abusado más por parte de los vendedores de aire que el “aura”, con excepción tal vez de “la energía”.
Sin embargo, allá donde los charlatanes abusan de la retórica y las lecturas en frío, la Ciencia explica que no es un fenómeno sobrenatural ni conlleva propiedades extraordinarias:
Aunque se alegaba que el aura Kirlian presenta información sobre el “bioplasma” o la “energía vital” del objeto, en realidad es sólo “una imagen visual o fotográfica de una descarga de corona en un gas, en la mayoría de los casos el aire del ambiente”. Por otra parte, los experimentos han fracasado en producir evidencia de que el patrón de la corona esté relacionada “con la condición fisiológica, psicológica o psíquica de la muestra”, sino sólo para la presión del dedo, la humedad y otros factores mecánicos, ambientales y de fotografía (unos veintidós en total). Los escépticos observaron que incluso los objetos mecánicos, tales como monedas o clips de papel, podían producir un “aura” Kirlian (Watkins y Bickel, 1986).
Así que si alguien afirma que puede leer tu aura, ¡te está embaucando!
(visto en Friendly Atheist)