La iniciativa de Sin Dioses, es que en vista de que un 24 de noviembre se publicó El origen de las especies (1859) y otro 24 de noviembre se descubrió a Lucy (1974) es un día ideal para conmemorar la evolución y la ciencia con que se hizo este gran descubrimiento.
Como ya lo he dicho antes, no comparto el término ‘orgullo’ con que el resto de la comunidad escéptica hispanohablante se refiere a este día (de hecho, tengo problemas con el uso tan liberal que en general se le da a la palabra “orgullo”, que está al borde de perder su significado).
Pero eso no significa que vaya a dejar de celebrar el hecho de que tenemos ancestros comunes con los monos y simios, lo que resulta un poco absurdo – ya que es más o menos parecido a celebrar que existe la fuerza de Gravedad. Pero es la respuesta necesaria ante el avance de mentiras doctrinarias, dogmáticas y fundamentalistas que niegan la verdad y los descubrimientos científicos. Es la posición que una persona que defiende la razón, el desarrollo social, la libertad de expresión, la verdad y el progreso debe tomar para combatir estos fascistoides cuentos de hadas, que difunden intolerantes negadores de la realidad.
Así que, feliz día primate, congéneres mamíferos.