La doctrina del valle de lágrimas realmente ha hecho estragos en la sociedad.
Además de ser una pieza clave en la religión, también ha servido para vender la idea de que se debe vivir con el sufrimiento y que revolcándose en ese patético lodal de autocompasión y miseria hay que encontrar la forma de ser felices y exitosos. Y Ómar Villalobos sabe cómo, en siete pasos:
“Las grandes personalidades de la historia no llegaron a serlo por un don especial o porque tenían algo innato en ellos. Lo fueron porque así se lo propusieron”.
Esto afirma Ómar Villalobos, un mexicano que se propuso ayudar a las personas a encontrar el éxito, y hoy lo ha logrado en diferentes partes del mundo.
Para ello, estudió a alrededor de cien genios y personajes reconocidos, pero no desde su biografía, sino desde cómo veían la vida y cómo trabajaban para conseguir lo que deseaban.
Realmente me intriga conocer cuáles son esas personalidades. Y más aún me intriga porque ha habido grandes personalidades de la historia que vivieron vidas tormentosas, con enfermedades mentales que les impedían sentirse felices y muchos fueron perseguidos por fuerzas religiosas.
Y es que ahí no para la cosa. Hay que tener en cuenta que muchas de las grandes personalidades de la historia se confrontaron a otras grandes personalidades de la historia. Sólo uno podía ganar y ambos estaban en la posibilidad de perder al tiempo.
Eso difícilmente habría sido alcanzar lo que se proponían en el estado de felicidad absoluta que propone este charlatán. Y ciertamente el éxito vino de enfrentarse a esos obstáculos y superarlos con relativo éxito, en vez de ignorarlos y ya.
Sin embargo, la publicidad de Villalobos advierte:
Con ello, estableció varias similitudes, que resume como ‘Los secretos del éxito, en siete pasos’, una charla que dictará hoy en el Teatro Nacional La Castellana, de Bogotá.
Según él, luego del análisis que hizo de la vida de los genios, encontró patrones que pueden ser aplicados por todas las personas, independientemente de su condición.
“Por ejemplo, lo primero es buscar la felicidad personal. En esto muchas personas se equivocan porque sus planes de vida los hacen por conveniencia y no porque realmente se sientan a gusto con lo que realizan a diario. Muchos trabajan por dinero y no por placer”, explica Villalobos.
Otro error común es querer ser o tener lo que les pertenece a otros y, por eso, olvidarse de trabajar en lo que se desea.
¿Y si la felicidad personal es tener lo que tienen los otros?
Además, ¿siete pasos? Esto es lo más puro de la Nueva Era: siete pasos (siempre siete, número particularmente atractivo para los numerólogos) y vender “felicidad” y “éxito”. Aunque debo decir que a veces eso funciona. Por ejemplo, Villalobos debe estar feliz y ser exitoso vendiendo aire.
Porque eso es todo lo que hay en lo new age: se vende felicidad y es comprada por los incautos que no están convencidos de que la felicidad no se puede comprar (nunca antes mejor dicho).