Hay espectáculos que los partidos políticos deberían evitarse y evitarnos a todos.
Por ejemplo, la tardía decisión de echar a Samuel Moreno del Polo Demagógico Alternativo:
El Polo Democrático Alternativo anunció este martes su decisión de separar “pública y definitivamente” a Samuel Moreno Rojas del partido. La medida fue tomada por la Comisión Nacional de Ética y Garantías de la colectividad, dentro del proceso disciplinario interno que se le sigue al suspendido alcalde desde noviembre de 2010.
¿Qué? ¿El PDA tiene Comisión Nacional de Ética? ¿En serio? ¿Cuándo fue creada, ayer?
Para la Comisión de Ética, la conducta de Samuel Moreno “va en contra de los fines, principios y deberes establecidos” en los estatutos del partido y en el código de ética. Allí se ratifica que “todo miembro del Partido que participe en la administración pública, deberá dar ejemplo de rectitud, honradez, transparencia e idoneidad, en el marco de la Constitución Nacional, las leyes, los Estatutos y fines del Partido”.
Es curioso, porque cuando Petro denunció esto mismo, resultó que entonces era él quien iba “en contra de los fines, principios y deberes establecidos” en los estatutos del partido y en el código de ética.
Me resulta bastante satírico que un partido político tenga un código de ética.
En el comunicado, la Comisión sostiene que Samuel Moreno “causó daño grave a la imagen pública del Polo Democrático Alternativo”.
Ehh, no. Eso es algo en lo que ellos son expertos y estaban haciendo un genial trabajo hasta el momento. No necesitan a Samuel para dañar su imagen pública. Resistirse a investigar flagrantes irregularidades de la administración y sólo empezar un proceso de este tipo cuando todos los órganos nacionales de justicia están tomando el caso no es la mejor receta para tener una buena imagen. Y mucho menos echar a Samuel faltando unos pocos días para el veredicto de los jueces.
A mí me suena a que si nunca se hubiera destapado lo podridamente corrupta que fue la administración Moreno, en el PDA perfectamente habrían podido enterarse y jamás lo habrían investigado. ¿Qué tal eso como forma de causar “daño grave a la imagen pública del Polo Democrático Alternativo”?
Lo que es aún peor: de todo esto se logra inferir que lo único que le importa al Polo es su imagen. Esto es de un chistoso sin precedentes: la -hasta el momento inútil- comisión de ética del partido encuentra reprochable que se haya dañado la imagen del partido. Al parecer no les preocupa mucho la corrupción, sino que nadie se entere, porque podría ser mala prensa.
Por cierto, ¿no han considerado que también Iván Moreno Rojas, hermano de Samuel e investigado por la justicia también debería conocer la furia de la Comisión de Ética del partido?
¿No les parece que lo éticamente correcto es presentar públicamente disculpas a todos aquellos a quienes acusaron de “derechistas”, en su cierre de filas tipo KGB para proteger a Samuel?
¿No van a abrir una investigación de la Comisión de Ética para investigar a su presidente Jaime Dussán, que dijo que el Polo no está con ni contra las Farc? No sé, pero eso también atenta contra la imagen del partido, toda vez que están tratando de quitarse de encima ese estigma de auxiliadores y voceros políticos del terrorismo.
