Hay dos cosas que le admiro a los musulmanes: su forma de hacer que los gobiernos le teman al pueblo (idea que en V de Venganza se me antojó ideal, aunque yo asumí que un gobierno que le temía a un pueblo, era a un pueblo educado) y la velocidad con la que tienden ha hacer las cosas en comparación con la burocracia de Occidente.
Lástima que esa velocidad, sea para impulsar la agenda de extrema derecha y discrimnidora del islamismo, avalada por el multiculturalismo:
Un tribunal de la sharía islámica se ha establecido en Amberes, la segunda ciudad más grande de Bélgica.
El tribunal de la sharía es la iniciativa de un grupo radical musulmán llamado Sharia4Belgium. Los líderes del grupo dicen que el propósito del tribunal es el de crear un sistema paralelo legal islámico en Bélgica con el fin de desafiar la autoridad del Estado como ejecutor de la protección de las leyes civiles garantizadas por la Constitución belga.
El tribunal de la sharía, que se encuentra en el distrito Borgerhout de Amberes, está “mediando” las controversias de derecho de familia para los inmigrantes musulmanes en Bélgica.
Los autoproclamados jueces musulmanes administrando el tribunal están aplicando la ley islámica, en lugar del secular sistema belga de derecho de familia, para resolver las controversias relativas a cuestiones de matrimonio y divorcio, custodia y manutención de los hijos, así como con todos los asuntos relacionados con la herencia.
No fue ninguna sorpresa para mí, descubrir que Sharia4Belgium está relacionado Anjem Choudary, el lunático que quiere imponer las retrógradas leyes islámicas en toda Europa.
Lamentablemente no sé qué ha dicho el gobierno belga sobre esta clara usurpación de funciones de la rama judicial, que hasta donde yo supongo, debe ser un delito. Y deberían empezar a hacer las investigaciones pertinentes antes de que del derecho de familia, este inquisidor pseudotribunal se apropie también del derecho penal belga. Digo yo, que no es probable que se encuentren a sí mismos culpables.
