Todos ustedes, católicos del mundo, hoy no deben comer carne. Les queda terminantemente prohibido.
Eyy, no me miran a mí, lo dice la Iglesia:
Dicen los obispos que el viernes debe ser un día de penitencia, ya que es el día en que se dice que Cristo ha muerto.
Dicen que la penitencia el viernes será “una marca clara y distinta” de la identidad católica y un acto de culto común.
Ohh, qué considerados. ¿Y por qué hacen esto?
Una resolución en mayo, dijo que la penitencia comenzaría el 16 de septiembre para conmemorar el primer aniversario de la visita del Papa al Reino Unido.
¡Por supuesto! Más sacrificios fisiológicos para glorificar la superioridad de una inexistente alma frente al mundano cuerpo. ¿Que acaso no no pueden hacer una conmemoración como las personas normales?
(dato vía The Freethinker)
**Actualización: Como me hacen caer en cuenta en los comentarios, esta medida espiritual tiene unas limitaciones geográficas. Sólo aplica para Inglaterra y Gales.