Parece que dios y los espíritus de la sabana no quieren que Hugo Chávez se recupere, entonces decidió someterse a rituales chamánicos para combatir el cáncer:
El presidente Hugo Chávez se sometió a varios rituales chamánicos de pueblos indígenas de Venezuela para combatir el cáncer que sufre, del cual asegura se recuperará totalmente para las elecciones de 2012.
“Nosotros venimos de lejos del Estado Amazonas (sur) para bendecirle”, dijo el chamán Miguel Morales de la etnia Jivi durante la ceremonia, que se realizó en las afueras del palacio presidencial de Miraflores.
“Invocamos a nuestros ancestros para que te sanes y nunca más padezcas de enfermedad” alguna, expresó otro chamán durante el ritual.
Yo apuesto en contra. ¿Se puede?
Esto es “contra enemigos, contra mal de salud”, añadió Morales, explicando que el ritual también sirve para que “no le caigan maldades, para que le dejen en paz políticamente” al presidente, que lució una corona de plumas obsequio de una de las indígenas asistentes.
“Gracias por este penacho, yo lo considero sagrado y lo guardaré toda mi vida”, expresó el mandatario, que vistió ropa deportiva con los colores de la bandera venezolana durante el acto, en el que también hubo danza, cantos y oraciones de sanación de las etnias Yekuana, Jivi y Wayuu.
Mejor dicho, después de esto recurrirá a Thor, Zeus y Quetzalcóatl. Pero lo que yo quiero que llegue es cuando se le acabe todo ese Facebook de amigos imaginarios. ¿Entonces a quién va a recurrir?
“El cáncer fue extirpado y con el poder de dios y todos los dioses se fue y nunca más volverá”, enfatizó el gobernante, reiterando que espera estar completamente recuperado en diciembre para competir en las presidenciales de 2012, en las que asegura vencerá por ‘nocaut’ a la oposición.
Ahh, sí: la ciencia hace todo el trabajo (ya me gustaría ver a Bochica extirpando un cáncer) y resulta que el bienestar lo va a proporcionar alguien de quien hay tantas pruebas de que exista, como las hay de que exista Supermán.
Chávez, de 57 años y en el poder desde 1999, espera ser reelecto en 2012 para un tercer mandato de seis años.
Ésa es otra de las desafortunadas consecuencias de la Ciencia. Posibilitar que se extienda el sufrimiento y la polarización de un pueblo cuyo único error fue creerle a un político y que está viviendo su lenta y dolorosa caída hacia el infierno en la Tierra – lo que, para algunos es el paraíso.
Y nadie parece preocuparse por la violación a la separación entre las supersticiones y el Estado.