El multicultural Occidente ya está viendo las consecuencias de seguir la doctrina de respetar irreflexivamente las creencias de los demás sin importarle lo muy violentas, fascistas, sexistas y totalitarias que estas sean.
Gary Smith es una víctima más de esta ideología que terminará conviertiendo a Europa en Eurabia:
Una banda de cuatro hombres musulmanes lanzaron un horrendo ataque a un profesor de Religión porque no estaban de acuerdo con que él enseñara estudios religiosos a niñas musulmanas, se escuchó ayer en un tribunal.
Gary Smith, de 28 años, quedó con cicatrices faciales, pérdida de la memoria tanto a largo como a corto plazo, y ahora no tiene sentido del olfato.
Él se deprimió después de que su rostro fuera cortado y sufrió una hemorragia cerebral, fractura de cráneo y se le rompió la mandíbula tras el ataque.
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Armados con una barra de hierro y un ladrillo, ellos le dieron puñetazos, patadas y atacaron al señor Smith, dejándolo inconsciente cubierto de sangre en el pavimento en Burdett Road, Tower Hamlets, al este de Londres.
El señor Smith fue llevado al hospital después de que fuera encontrado por dos transeúntes, y sólo recuperó la conciencia dos días después.
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“Sus heridas incluyen sangrado en el cerebro y la fractura de la mandíbula superior. Ha quedado con cicatrices permanentes en la cara. El ataque fue premeditado y fue vicioso y sostenido.
También fue un ataque cobarde, llevado a cabo por un grupo de al menos cuatro hombres, con armas, contra la única víctima que habría tenido limitadas oportunidades de defenderse”.
El maestro había estado en la escuela durante ocho años enseñando religiones como el cristianismo, el judaísmo, el islam, el sijismo, el budismo y el hinduismo.
Lo lógico en este caso, sería que el multicultural jurado o el juez le diera una medalla a estos hombres, pues en su cultura, estaban defendiendo la pureza de su superstición.
