Salvo que no lo es.
La película nadie pretende hacerla pasar por real, en cambio esta patética escena preparada que tuvo lugar en TransMilenio tenía por objetivo hacer que todo el mundo les creyera:
Afortunadamente en Colombia no contamos con los recursos económicos para hacer efectos especiales decentes que garanticen conversiones inmediatas de crédulos incautos.
Si no, Lourdes y Fátima estarían quebradas.